Chorlitejo Patinegro, Charadrius alexandrinus

Creo que no os había presentado a este pequeñajo, es el Chorlitejo Patinegro, con la tonalidad de plumaje que presenta en éstas fotos no resulta muy vistoso pero durante la primavera los machos adquieren unos vivos colores en su plumaje muy llamativos, a estas alturas ya han mudado sus plumas y su plumaje presenta esta tonalidad parda similar a las zonas por donde

lo podemos encontrar, lagunas salinas, embalses, zonas costeras y demás. En mis jornadas fotográficas, casi siempre suele estar cerca de mi escondite, comienzan a llegar cuando empieza a amanecer y no realizan grandes movimientos, se familiarizan muy facilmente con el escondite, incluso alguno se cobija en la sombra que produce en los meses calurosos, otros se alimentan tan cerca de mi, que cuando estoy tumbado en el suelo se asoman a ese tubo que refleja su imágen, la lente del teleobjetivo, y algunos se quedan sorprendidos.

No requiere grandes opticas para poder fotografiarlos, con un tele de 300mm bastaría ya que son muy confiados, eso si, suele ser muy rápidos cuando buscan su alimento, y en muchas imágenes los Chorlitejos saldrán movidos o no saldrán, en las horas centrales del día ya con la

barriga llena suelen dedicar bastante tiempo al cuidado del plumaje, vivir en un entorno lleno de barro es lo que tiene, tambien suelen darse pequeños sueñecitos de cuando en cuando, con lo cual los tendremos un rato parados y podremos obtener alguna que otra imágen.

Todas éstas imágenes del Patinegro están tomadas con un tele de 800mm, la sesión fotográfica no era para el, pero con lo fotogénico que es no se podía perder la oportunidad.... con un objetivo como éste no fué facil, ya que la distancia mínima de enfoque creo que es de unos 14 metros y casi siempre estaban más cerca, con lo cual tenía que esperar a que se alejaran para poder

enfocarlos, pero al final conseguí sacar algo decente. A esta especie y otras muchas más les suelo tener un cariño especial, ya que cuando estoy fotografiando por las lagunas, siempre hay alguno cerca del escondite, cuando apuntas con el tele y lo enfocas ves como te mira, unos bichos muy curiosos y muy agradecidos.

Nikon D200, Canon FD 800mm f5,6 ISO 100, RAW